¿Existe la almohada ideal?
Aunque seguramente no dormimos todo lo que nos gustaría, lo cierto es que pasamos muchas horas al día en la cama. Y es precisamente la postura que adoptamos durante la noche la que determina directamente el tipo de almohada que necesitamos. Pero incluso cuando nos diponemos a echar una pequeña siesta es importante prestar atención a la postura de nuestro cuello.
La clave está en la alineación del cuello y la columna vertebral. Pero hay varios factores muy importantes a tener en cuenta: la posición del cuerpo a la hora de dormir, el material de la almohada y el material del colchón.

Descubrimos cuál es la mejor para dormir.
Principales posiciones a la hora de dormir
- Dormir boca abajo. Esta posición es la menos recomendada porque fuerza la rotación cervical. Sin embargo sabemos lo difícil que es cambiar un hábito tan arraigado, por lo que si duermes así recomendamos una fina y blanda.
- Dormir de lado. Para tener una correcta alineación de la cabeza con el tronco se necesita una más bien firme y gruesa, lo suficiente como para cubrir el espacio entre la oreja y la cama . Una inclinación de la cabeza durante las horas de sueño, tanto por exceso como por defecto de almohada nos hará despertarnos con la sensación de habernos transformado en Robocop.
- Dormir boca arriba. En este caso se necesita una fina y firme, capaz mantener la cabeza bien alineada con el resto del cuerpo. Si mantienes esta postura durante toda la noche es probable que amanezcas con rigidez en la zona lumbar, por lo que se recomienda poner otra almohada bajo las rodillas. Así se consigue una ligera flexión de rodillas que mantendrá la zona lumbar más relajada.
La almohada
Ésta debe tener consistencia y firmeza suficientes como para sujetar la cabeza. Hoy en día hay infinidad de materiales, combinaciones de tejidos, etc. Las viscoelásticas suelen ser un valor seguro, jugando con las diferentes durezas y firmezas teniendo en cuenta lo explicado anteriormente sobre el tipo de postura durante el sueño.
En definitiva y para resumir, no existe la almohada ideal, sino la almohada idónea en función del tipo de posición adoptada en la cama. Una vez más el dicho de «más vale calidad que cantidad» cobra relevancia en lo concerniente a las horas de descanso. Y recuerda, en FisiOHM recomendamos dormir siempre con almohada.