¿SUFRES EN SILENCIO? HEMORROIDES…
Las hemorroides en el embarazo y sobretodo en el post-parto son de lo más COMÚN. Lo
ponemos en mayúsculas porque nos gusta enfatizar en que lo que es COMÚN no tiene por
qué ser normal, ni tenemos que ser pasivas frente a ese problema.
Vamos a repasar un poco…y esto seguro que servirá no solo para embarazadas.
Una hemorroide es la dilatación de una vena en la zona final del recto(internas) o en el ano
(externas). En general es debido a un exceso de presión en las venas que recubren esa
zona. Esto suele ir asociado a estreñimiento.
¿Tienes estreñimiento? Esa pregunta que solemos hacer los profesionales de suelo
pélvico, rara vez se contesta bien a la primera…si indagamos un poco más… pero ¿haces
mucho esfuerzo al defecar? Bueno… aquí vienen los matices.
Nadie nos ha enseñado cómo ir de vientre porque es algo bastante fisiológico e intuitivo. Y
¿por qué no decirlo? Un poco TABÚ. Hay que hacerlo en casa, rápido, silencioso e inodoro
a ser posible. Y esto trae muchos problemas porque en general eso lo hacemos forzando el
suelo pélvico.
Algunas personas no van al baño todos los días porque tienen un ritmo intestinal más lento
pero eso no es malo ni causa hemorroides. Cada persona tiene un ritmo defecatorio
En el caso de las embarazadas se agrava el problema ya que debido al crecimiento del
útero todos los órganos se ven desplazados e incluso «aplastados» como el recto y esto
puede aumentar el estreñimiento.
Vamos a dar varios consejos para todos los públicos y algunos específicos para nuestras
futuras mamás.
DECÁLOGO PARA SER UN «CULO » DE BUEN ASIENTO
1° Tendríamos que hacerlo cuando nos viene de manera natural, como orinar. Sin forzar
pensando en lo que nos sea cómodo el resto del día.
2° Tener una alimentación equilibrada y rica en fibra.
3° HIDRATACIÓN. No somos cactus. Y si tomamos fibra y no la hidratamos luego las heces
son mucho más duras y difíciles de expulsar
4° Posición: Sobre todo en occidente hemos olvidado cómo se hacía antes de tener un baño
con 4 paredes. En CUCLILLAS. Esta es la posición más fisiológica ya que relaja un músculo
del suelo pélvico que hace más difícil la evacuación cuando está tenso. Y no hace falta ser
del circo, con poner un banquito o similar que nos eleve las rodillas por encima de las
caderas es suficiente.
5° NO CORTAR LA RESPIRACIÓN. Cuando hacemos fuerza para ir al baño y encima
hacemos una APNEA con los pulmones llenos, le hacemos una presión fuerte y brusca a
nuestro suelo pélvico y favorecemos que se dilaten esas venas y aparezcan hemorroides.
Siempre hacer el esfuerzo soplando y dejando que el abdomen vaya hacia la columna y no
hacia el suelo pélvico
6° ¡¡¡¡¡¡¡MUÉVETE!!!!!!!! Uno de los mecanismos para activar el tránsito es el movimiento y
la forma de vida actual nos está llevando a todo lo contrario. Así que ¡ponte con ello! Yoga,
pilates, hipopresivos son algunos deportes que favorecen pero sino haz lo que más te guste
y despégate de la silla.
7° Si por medicación, embarazo u otras circunstancias puntuales, aún haciendo todo esto
sigues notando molestias en zona del ano después de ir al baño puedes limpiar la zona con
papel higiénico húmedo para no irritar y usar pomadas que ayuden a desinflamar y
cicatrizar.
8° Aplicar un hielo directamente sobre las hemorroides cuando escuecen mucho es una
solución de lo más práctica, sobre todo para embarazadas que no pueden usar medicación
9° ¡¡¡¡¡Tómate tu tiempo!!!!! No le metas prisa a algo que debería venir desde la
relajación…no deberíamos tener que empujar sino relajar el esfínter y dejar que salga a su
ritmo, y si no sale, no forzar, volver más tarde quizás con más ganas o más tiempo.
10º Y dejamos lo mejor para el final…¡EJERCITA TU SUELO PÉLVICO! Un buen tono
muscular y alineación de las vísceras puede ser muy importante. No dudes en venir a
consultarnos.